Antes del masaje entendemos lo que es el contractura muscular. Es una contracción involuntaria y dolorosa de uno o más músculos, que se vuelven rígidos. Además, el tono muscular aumenta lo suficiente como para que puedas sentirlo al tacto.
Las causas pueden ser diferentes:
- problemas articulares, desequilibrios posturales y musculares
- tensiones movimientos excesivos, bruscos y violentos
- falta de calefacción adecuado para aquellos que practican deportes
- esfuerzo excesivo sin preparación física adecuada
la contractura no causa ninguna herida anatómico a las fibras musculares. No es grave y fácil de remediar.
Las zonas más afectadas suelen ser las lumbares y la espalda, pero también los músculos de las piernas, glúteos y brazos.
Quien sufre de contracturas
La contractura no es un dolor reservado a los deportistas, le puede pasar a cualquiera que la padezca.
Puede llegar a quienes se sientan incorrectamente en el escritorio, a quienes tienen malas posturas durante la vida diaria, a quienes realizan esfuerzos inusuales. Todo esto puede conducir a dolores musculares.
Qué hacer en caso de contractura
El músculo está duro y dolorido, y primero debe estar en completo reposo. Si a pesar de lo demás la situación no mejora, es recomendable contactar con un masajista profesional o un fisioterapeuta que podrá realizar un agradable masaje descontracturante en la zona dolorida.
Esto promueve el flujo de sangre a los músculos y el estiramiento muscular. Alivia la tensión muscular y también obtiene beneficios contra el dolor.
También se suele recomendar una serie de ejercicios se extiende y algo de ejercicio de actividad deportiva aeróbica como apoyo, para facilitar el aflojamiento de los músculos.